Ésto es de Pasión.

Que tal amigos! Aquí estamos, aquí seguimos, aquí continuamos. Viene una nueva, la semana pasada de pronto se activaron vuelos. Jueves fue Saltillo-San Antonio, viernes fue San-Antonio-Monterrey-Saltillo. Sabado estuvo un poco más pesado, ahorita cuento el sábado.
Hoy tuvimos junta los pilotos de la compañía con el jefe. Todo va bien, la compañía va hacia adelante, etcétera. Mencionó algo, muy importante. Dijo que la nuestra era una profesión diferente, muy diferente en todos los aspectos. Muy de acuerdo. Dijo algo también, aquí si no te apasiona ésto no eres ni serás para eso. ÉSTO ES DE PASIÓN. Y es algo que siempre he dicho. ¿Sabes? volar lo sientes. Cualquier aviador que esté leyendo ésto sabe de que hablo. Y si a veces las cosas se vuelven de pronto rutina, es normal, casi todo es así. Pero de pronto analizas cada parte del vuelo y empiezas a darte cuenta de que haces lo que te gusta y para ti es el mejor trabajo del mundo. El otro día en el despegue, me puse a analizar y observaba todo como si fuera mi primer vuelo: el sonido de la aceleración de los mototes, es único, e´s como música sabes. Oyes las llantas avanzando cada vez mas rápido por el suelo. Oyes la aceleración. Checas los parámetros de los motores ves todo en orden ves tu velocímetro acelera impresionantemente checas cien nudos y avisas al capitán no hay ninguna luz de falla encendida todo es como mágico y más cuando ésas ruedas se desprenden del suelo.
Antier despegué a las 9 de la mañana con destino Tijuana, cargamos combustible hicimos lo necesario y de ahí a McAllen, esperamos unas horas o varias horas en McAllen y poco después de la media noche volamos de regreso a Tijuana. Combustible, migración, etcétera y como a las cinco de la mañana despegamos a Saltillo. Solo dormí unas horas en le FBO en McAllen, todo lo demás fue despierto. Llendo sin pasajeros de Tijuana a Saltillo mi capitán se pasó atrás a dormir. Primero en mi mente empecé a molestarme porque no nomás él era el cansado, pero después pensé diferente. Uno que bueno que me tuviera la confianza de irse a dormir y dejarme adelante a cargo de todo. Tomé un audífono de mi Mp3 me lo puse y con el otro oído oía la frecuencia. Empecé a pensar muchas cosas. Entre ellas pues del bonito trabajo que tenía. Y ahí estaba, enalgún lugar del espacio, con un alma dos metros detrás de mí que estaba dormitando y a bordo de un avión a 41,000 pies sobre el nivel del mar volando alrededor de 900 Km/hr. Cerca del cielo, igual también de Dios (si Diana contesto lo de tu comentario claro que creo en Dios jeje =) ), con la tierra abajo, un tipo a cientos de kilómetros de mó observando mi posición en su pantalla del radar. De pronto empieza a amanecer. Fue un amanecer como pocos que había visto en mi vida. Sabes el no dormir toda ésa noche valió la pena con ése amanecer. Poco después del amanecer llamé al capitán, empezamos el descenso y arrivamos a Saltillo poquito después de las 7 de la mañana. Llegué a mi casa como a las 8:30 dormí un ratito y a las 11:30 de la mañana estaba en el aeropuerto listo para salir a Houston. Ahí dormí llegué hoy en la mañana. Gajes del oficio. Es curiosa mi profesión. Extraña, demandante, me gusta en todos sus aspectos. Gracias a Dios, a la vida, a mis padres y a tantos amigos por su apoyo. Un abrazo y estaremos por aquí escribiendo pronto de nuevo, saludos!